En Mesenia - como en el resto del Peloponeso y de Grecia - podrá disfrutar de la célebre y comestible «aceituna de Kalamata DOP» (Denominación de Origen Protegida) como tapa o ingrediente en diversos platos. El aceite de oliva DOP «Kalamata» es también conocido.
Desde la antigüedad y hasta la Edad Moderna ha sido una región favorecida y fértil, con una gran variedad de productos agrícolas. Las aceitunas y el aceite de oliva siguen siendo «protagonistas» en la producción global. Los olivares y los centenarios olivos - verdaderas esculturas de la naturaleza - se encuentran siempre presentes y las antiguas almazaras son puntos de interés.
Es más, se ha descubierto un ideograma del aceite de oliva y de la aceituna en una tablilla de lineal B descubierta en el Palacio de Néstor en Chora, Trifilía. Es uno de los testimonios más antiguos sobre la presencia del olivo.
En Mesenia - como en el resto del Peloponeso y de Grecia - podrá disfrutar de la célebre y comestible «aceituna de Kalamata DOP» (Denominación de Origen Protegida) como tapa o ingrediente en diversos platos. Tiene un color castaño oscuro característico y un sabor suave y afrutado. Las aceitunas se introducen en ensaladas y salsas que acompañan legumbres o platos cocinados y guisos. Famosos son también los productos de panadería con aceitunas: el pan de aceituna (eleópsomo), los hojaldres de aceituna (eliópita), etc.
El aceite de oliva DOP «Kalamata» es también conocido. Las principales variedades de la región son koroneiki, matsolia y, en menor medida, mavrolia. Destacan por su pureza y su gran valor nutricional. Desde 1990 en Mesenia se desarrollan cultivos biológicos que se han extendido significativamente.
La recolección de la aceituna. Comienza en noviembre o en diciembre y se realiza a mano, con varas o recogiéndolas del suelo. Es un método natural para asegurarse que los frutos tengan cuanto menos daños sea posible.
A continuación, se trazan y «amargan» los frutos, se colocan en aceite y se almacenan en recipientes con aceite o vinagre (de forma opcional en salmuera). Se conservan durante un largo periodo de tiempo.
Catas de aceituna y de aceite de oliva. Se realizan en el marco del Festival del Aceite de Oliva y de la Aceituna de la Cooperativa Agrícola de Kalamata, durante el mes de abril, de los Días de Gastronomía Local en el mercado central de Kalamata, en eventos de catas en almazaras de las cooperativas agrícolas, y otros. Se organizan muchos seminarios de cata de aceite de oliva y gastronomía de Mesenia en toda la región.
Puede participar en rutas organizadas y temáticas sobre el aceite de oliva y food pairing y a través de ellas puede visitar viejas almazaras y olivares en donde podrá ver el proceso de recolección de los frutos, si es que llega en la estación adecuada.
Más información sobre el Museo de la Aceituna de Esparta.
Más información sobre los productos locales, las recetas tradicionales y los olivares de Mesenia. Asimismo, sobre la ruta del olivo y las rutas propuestas sobre la cultura de la aceituna en Mesenia.
El uso de la aceituna en la antigüedad y la corona de los Juegos Olímpicos
En relación al uso de la aceituna en los centros micénicos del Peloponeso, son importantes los testimonios que ofrecen la tablillas de lineal B de Pilos y Micenas. Las escrituras de estas tablilla utilizan tres ideogramas diferentes que representan la aceituna y el aceite de oliva. A partir de las tablillas, pues, conocemos un poco más sobre el uso del aceite en la vida diaria, en los rituales de cultos, en la actividad comercial y en la industria (aromas, textiles, etc.) de la Edad del Bronce tardía.
Las fases de la producción de aceite en la antigüedad eran las siguientes: a) Cultivo y recolección de la aceituna, b) Aplastamiento del fruto para que produjera pasta, c) Prensado de la pasta para producir un líquido que luego será recogido mientras que el hueso se desecha y d) Separación del líquido en aceite limpio - que se almacena en recipientes o cisternas - y líquido vegetal no comestible.
En el aplastamiento de la aceituna se aplicaron a lo largo de toda la antigüedad, durante siglos, dos técnicas (punto 3): a) Trapetum y b) Mola olearia.
En los Juegos Olímpicos, la corona de los vencedores estaba hecha de hojas de olivo. Un muchacho cuyos padres se encontraran en vida cortaba con tijeras de oro las hojas del olivo cerca del templo de Zeus. A continuación, las llevaba al templo de Hera y las colocaba sobre un altar de marfil. Allí la recogían los heladonices, los jueces de los antiguos Juegos Olímpicos, y preparaban las coronas que ofrecerían después a los vencedores como premio.
Por último, el olivo aparece en la antigüedad como elemento decorativo en objetos de la vida diaria con motivos las ramas y los frutos del olivo.
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